Acciones

Con el objetivo de buscar financiamiento por medio del Mercado de Capitales, algunas empresas emiten acciones, que se presentan como oportunidades para los inversores. 

Por definición, una acción es un activo financiero que representa una parte alícuota del capital social de una sociedad anónima. Al adquirir acciones de determinada firma, se reciben ciertos derechos sobre ella y, en consecuencia, el inversor obtiene la categoría de socio, de manera proporcional a la cantidad comprada.

Las acciones, por lo tanto, son un instrumento bursátil que se considera de renta variable, ya que los ingresos generados por la inversión no están fijados desde el inicio, como sí sucede con los títulos públicos u obligaciones negociables.

El accionista va a obtener un rendimiento variable sujeto a volatilidad en el precio de cotización de la acción, que depende de la rentabilidad de la empresa, expectativas de mercado y coyuntura económica nacional e internacional. En algunos casos, las acciones dan derecho al cobro de un dividendo, entendido éste como la distribución de ganancias que realiza una compañía entre sus accionistas, pero está sujeto a la decisión de cada empresa particular. Esta última definirá: si lo paga, con cuánta frecuencia y, si lo hace, en efectivo o mediante la entrega de nuevas acciones.
Considerando las grandes variaciones que puede mostrar el precio de las mismas, se considera como una inversión con mayor riesgo a la renta fija. Por lo tanto, la decisión de invertir en ellas debe ser evaluada por cada persona, sabiendo que puede obtener una recompensa mayor en comparación a otras alternativas, pero también sufrir una pérdida de lo invertido.

En Argentina el índice que agrupa a las acciones locales es el S&P Merval. El mismo, reúne a las líderes de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, mostrando el rendimiento general del mercado.

Como adelantamos, para las empresas emisoras, las acciones son un método para obtener financiamiento. Se trata de fragmentos del capital social de una firma y, mediante un proceso de oferta pública inicial, se colocan en el mercado primario a cambio de fondos para financiar sus operaciones.
A diferencia de otras formas de financiamiento, como las obligaciones negociables o fideicomisos financieros, este instrumento no implica el pago de cupones de interés o devoluciones de capital. La emisión de acciones concede ciertos derechos a sus tenedores, pero la empresa queda desligada (más allá de la emisión), a excepción de aquellas que distribuyen sus ganancias en dividendos.

Por último, que una empresa cotice públicamente en el Mercado de Capitales significa la presentación de documentos e información financiera actualizada. De esta manera, la firma obtiene cierto prestigio mediante este régimen de transparencia, al tiempo que se le facilitan otros canales de financiamiento.